Las mejores frutas para tratar tu hígado graso

 

Las saludables manzanas

¿Cuántas manzanas consumes al día? Pues desde nuestro espacio te recomendamos que consumas en tu desayuno una manzana verde. Son las mejores, las que más reducen el nivel de azúcar en sangre y las más medicinales según los médicos. Las manzanas, en esencia, son muy indicadas para limpiar el hígado gracias a su maravilloso nivel de  antioxidantes. Luchan contra los radicales libres y, además, como te hemos dicho mantienen a raya el nivel de azúcar en sangre.

Pero aún hay más, las manzanas disponen de ácido málico, el cual permite prevenir la aparición de piedras en el hígado y riñones, cuidan muy bien de estos órganos. Sin contar además que hemos de comerlas con piel puesto que gracias a ella disponemos de más minerales capaces de atacar la grasa y  eliminar los metales pesados de nuestro organismo. Así pues recuerda: una manzana al día y cuidarás de tu salud.

El jugo de limón

Ya conoces de sobra los grandes beneficios del limón, y estamos seguros de que diariamente, te tomas por ejemplo tu vaso de agua tibia con jugo de limón. Si no es así te invitamos a que empieces a incluirlo en tu dieta, porque te hará sentir mucho mejor y porque tu hígado lo va a notar. Los cítricos en general favorecen la depuración del hígado gracias a sus antioxidantes.

Conseguimos rica vitamina C, y fortalecemos nuestro sistema inmunológico. Si no toleras demasiado el limón pon menos cantidad en un vaso de agua, pero lo más indicado es que tomaras el jugo de un limón al día, así que bastaría por ejemplo con diluirlo en un litro de agua para que no te moleste tanto su fuerte sabor.

El limón tiene unos componentes muy parecidos a nuestros propios jugos digestivos, con lo cual, ayuda directamente al hígado a realizar sus funciones, a eliminar toxinas y a absorber nutrientes.

Además, es un aliado estupendo para fortalecer las enzimas hepáticas y para regular los niveles de hidratos de carbono en la sangre. 

El pomelo o toronja, siempre medicinal

Al igual que el limón, el pomelo o toronja se alza como las mejores frutas que pueden cuidar de tu hígado. Pero no de igual modo, verás: el pomelo está compuesto por enzimas que estimulan  de un modo muy especial el hígado ayudando a eliminar grasas y toxinas. Es excelente.

Además los pomelos disponen de alto grado de ácido málico y carotenoides, dos elementos que fortalecen y sanean este órgano tan importante. Tampoco debemos olvidar su alto contenido en naringenina, la cual nos permite descomponer los ácidos grasos acumulados en el hígado y expulsarlos. Es maravilloso.

El saludable aguacate

Hubo un tiempo en que no se confiaba en las virtudes de esta fruta deliciosa, pero lo ideal es que lo consumamos con moderación, no más de uno al día por ejemplo. Pero debes saber que sus virtudes radican precisamente en su beneficioso ácido oleico (un tipo de ácido graso monoinsaturado muy sano). Este tipo de ácido nos permite reducir los niveles de colesterol.

Además hemos de recordar que dispone de fibra, que sacia muchísimo nuestro apetito y que además, reduce el nivel de glucosa en sangre. Todo ello nos puede ayudar diariamente a mantener una nutrición muy adecuada con la cual cuidar de nuestro hígado graso, consiguiendo que esas células dañinas se almacenen en nuestro órgano, optimizando sus funciones básicas. ¿Empezamos hoy mismo a incluir aguacates por ejemplo en nuestras ensaladas?

Las uvas

Las uvas tienen un gran efecto depurativo en el organismo, lo cual se ha demostrado mediante diversos estudios que se le han realizado, por este motivo se ha creado una terapia o tratamiento natural llamado la cura de uvas. Esta terapia se utiliza para tratar diversas enfermedades precisamente por los grandes y poderosos efectos depurativos a nivel hepático, como también tiene poderes que protegen y fortalecen la sangre.

Las pasas

¿Has oído hablar de los beneficios del agua de pasas? Son increíbles y muy adecuados, en especial, para favorecer nuestra salud hepática. En nuestro espacio te recomendamos a menudo sencillos remedios para desintoxicar y fortalecer tu hígado y, en esta ocasión, queremos hablarte de uno bien especial que te dará un gran resultado.

¿Sabes cuál es el principal secreto del agua de pasas? Que consigue estimular los procesos bioquímicos del hígado ayudándole a depurar mejor la sangre. Las propiedades del agua de pasas residen principalmente en los increíbles beneficios de las uvas, los cuales todos conocemos. Si sigues este remedio a lo largo de 4 días seguidos, notarás cómo tus digestiones se realizan mucho mejor y disfrutas de una mayor energía.

Beneficios del agua de pasas 

Los médicos lo recomiendan muy a menudo: comer uvas pasas por las mañanas nos ayuda a cuidar de nuestro corazón, a eliminar el colesterol malo, a reducir los triglicéridos y a evitar el molesto estreñimiento.

Las uvas pasas son, además, una fuente natural de vitaminas y minerales, pero estos beneficios aumentan considerablemente si, por ejemplo, nos limitamos a tomar el agua de las uvas pasas en remojo. De este modo, reducimos el contenido en azúcar y obtenemos un remedio medicinal muy adecuado para nuestro hígado.

Te lo explicamos.

Fuente natural de antioxidantes

Es importante recordar que las uvas pasas son una de las mejores fuentes naturales de antioxidantes. Hemos de pensar que son uvas desecadas, esos frutos tan ricos en bioflavonoides, perfectos para protegernos de los radicales libres y para reforzar nuestras defensas.

Las uvas pasas, y su agua, son un remedio tradicional para prevenir la aparición de numerosas enfermedades cardíacas y hepáticas. Vale la pena tenerlo en cuenta.

Nos permite depurar el organismo y eliminar toxinas

Como ya sabes, tanto el hígado como los riñones son esos órganos esenciales encargados de depurar nuestra sangre, de eliminar metales pesados o toxinas que, de acumularse, acabarían haciéndonos enfermar. Sin embargo, en ocasiones, estas funciones pueden verse dificultadas por una dieta inadecuada, por consumir demasiadas grasas o por llevar unos hábitos de vida incorrectos.

Beber agua de pasas durante 4 días seguidos, al menos una vez al mes, te permitirá ayudar a tu hígado a realizar sus tareas básicas de desintoxicación, será un aliado muy adecuado en esas épocas en que te sientes más pesada o notas que tus digestiones son más lentas y dolorosas.

Favorece la digestión

Tomar agua de pasas es un método sencillo y efectivo no solo para depurar la sangre y estimular la función hepática, sino que, además, nos ayuda a hacer las digestiones. Favorece la segregación de los jugos gástricos, los alimentos se procesan mejor y absorbemos mejor los nutrientes. Todos estos beneficios los notarás ya a los 2 días de tomar tu agua de pasas.

¿Cómo debo preparar mi agua de pasas?

Ingredientes

·         2 vasos de agua (400 ml).

·         150 gramos de uvas pasas.

Preparación

·         En primer lugar, te recomendamos seleccionar bien las uvas pasas. Prescinde de aquellas más brillantes, puesto que este brillo no es natural y suele ser resultado de algún tratamiento químico para que resulten más atractivas. Busca aquellas que tengan un color más oscuro y natural, y no deben estar tampoco ni muy duras ni muy blandas. Elige también aquellas que estén cerradas y que no tengan ninguna impureza.

·         Lo primero que haremos será lavar bien esos 150 gramos de pasas. Una vez estén bien limpias, resérvalas.

·         Pon a calentar esos dos vasos de agua. Cuando llegue a ebullición, añade las pasas limpias y permite que se haga una adecuada cocción a fuego lento a lo largo de 20 minutos. Muy fácil. No obstante, la preparación no habrá terminado aquí, sino que ahora debes dejar que estén en remojo con esa misma agua toda la noche.

·         A la mañana siguiente, no tienes más que separar el agua de las pasas y volver a calentar un poco esa agua tan deliciosa y medicinal que has obtenido. Puedes tomarla tibia o caliente, como más te guste, pero lo importante es que te la bebas en ayunas, nada más levantarte. Después, espera entre 30 o 35 minutos antes de desayunar.

·         Lo ideal es que lo hagas de un día para otro y que por la noche lo dejes todo preparado para poder tomar esa agua nada más levantarte.

·         Recuerda tomar este sencillo remedio a base de agua de pasas durante cuatro días seguidos. Elige siempre las pasas más oscuras y, para asegurarte que no han pasado por ningún proceso peligroso para tu salud, cómpralas en establecimientos orgánicos o naturales, donde sepas que no han sido cultivadas o tratadas con pesticidas.

·         Puedes seguir este remedio una vez al mes, no tiene efectos secundarios y lo más interesante es que dejamos a un lado ese “azúcar” que siempre está presente en las pasas. Si sigues una dieta baja en grasas, donde incluyas además frutas y verduras frescas, disfrutarás siempre de una mejor salud hepática, ahí donde esta agua de pasas será sin duda una buena aliada.